El pasado martes 14 de febrero en la Capilla se celebró una charla informativa dirigida a vecinos de Arguedas y Valtierra, sobre la segunda fase del Canal de Navarra a solicitud del Ayuntamiento de Arguedas.
Participaron en la misma Jesús María Rodríguez, Director General de Administración Local y Despoblación y Joaquín Puig subdirector de INTIA y responsable del área de riegos.
Se explicó el desarrollo del proyecto de esta segunda fase y de cómo afecta a la Ribera y se prevé el comienzo de las obras para el próximo año 2024.
La segunda fase del Canal de Navarra contempla la construcción de una conducción de doble tubería de acero de 71,4 kilómetros de longitud, que parte del canal actual en el término municipal de Pitillas y finaliza en Ablitas, cruzando los ríos Aragón, Ebro y Queiles, las Bardenas Reales y las autopistas A-68 y AP-68. Los trabajos tienen un plazo de ejecución de 48 meses y un coste de 249,7 millones de euros, más IVA.
La ejecución de las obras de la segunda fase se divide en tres actuaciones: en primer lugar, la balsa de Mostrakas, que hace de nexo de unión entre el Canal ya construido y la segunda fase; en segundo lugar, la conducción de doble tubería; y, en tercer lugar, la balsa de Tudela, ubicada en el Paraje de Montes de Cierzo.
La actuación se inicia con la balsa de regulación de Mostrakas, situada en el término municipal de Pitillas, a unos 7,5 kilómetros de dicha localidad. Su función es doble: por un lado, absorber las aguas no consumidas en el tramo anterior del Canal; y, por otro lado, asegurarse que los 71 kilómetros de tubería de la 2a fase siempre estén abastecidos. Se trata de una balsa con capacidad de almacenamiento de 107.000 metros cúbicos.
Posteriormente, tras la balsa, se inicia la construcción de la conducción de acero helicoidal de doble tubería de 71,4 kilómetros de longitud. Los diámetros de las tuberías oscilan entre los 1,5 y los 2 metros. Dispondrán de revestimiento interior apta para el contacto con agua para consumo humano. Este sistema de transporte tiene diseñadas 12 obras de toma para suministrar agua tanto de riego como de boca. A lo largo del trazado se cruzarán los ríos Aragón, Ebro y Queiles, salvaguardando las condiciones ambientales. Se atraviesan más de una docena de carreteras así como infraestructuras ferroviarias, y de riego y redes de abastecimiento, entre otras.
Por último, el proyecto contempla la construcción de la Balsa de Tudela, situada en el paraje conocido como Montes del Cierzo, a medio camino entre los municipios de Cintruénigo y Tudela. Su función consiste tanto en el almacenamiento como en la regulación de la reserva hidráulica. Su capacidad de almacenamiento es de 7,95 millones de metros cúbicos, resultando una infraestructura trascendental para la garantía de agua a la Ribera así como para su blindaje ante el cambio climático.
Durante la exposición se expusieron también las zonas regables que se están estudiando en este momento entre las cuales están las de Arguedas, Valtierra y Bardenas y que se concretarán más adelante.